Cuando faltaba poco más de una hora para el encuentro ante Uruguay, el técnico de Bolivia, Julio César Baldivieso, anunció que Daniel Vaca sería el capitán de la Verde, con lo que terminó por ceder ante la experiencia del portero de The Strongest, que fue uno de los últimos convocados, luego de la lesión de Romel Quiñónez, que venía siento el titular.
No fue una sorpresa, pues se veía venir. Ni bien se incorporó, Vaca, de 36 años, sentó presencia por su dilatada experiencia y buen momento en el Tigre, es más, la sorpresa era que Baldivieso lo había dejado fuera de la lista inicial de 30, ya que apostó por Quiñónez, Carlos Lampe y Gustavo Salvatierra.
"Todos venimos a sumar, eso es lo más importante", dijó Vaca cuando llegó a la concentración del seleccionado, dejando de lado cualquier tipo de polémica por su no convocatoria en la primera lista ni por su llamado de emergencia por Baldivieso. El DT decidió no tomarlo en cuanta, luego de la goleada que sufrió ante Argentina en un partido amistoso en Houston, que terminó con un humillante 7-0.
Es más, desde la interna del cuerpo técnico, se había filtrado que Daniel no iba ser tomado en cuenta tras la actuación en tierra estadounidense.
Tras la lesión en la mano de Quiñónez, el entrenador llamó a Vaca y en el primer entrenamiento de fútbol, que hizo en el Hernando Siles, lo puso en el equipo titular. Desde ese momento, el meta se convirtió en candidato para llevar el cintillo, junto con Edward Zenteno y Juan Carlos Arce, según lo confirmó Baldivieso.
La duda se despejó a poco del duelo ante los charrúas, cuando el DT le dijo al grupo que arquero llevará por primera vez el cintillo que venía luciendo en las últimas eliminatorias Ronald Raldes, que renunció hace poco.